La Gran Mezquita de Santa Sofía y la Mezquita de Cora, componentes del Sitio del Patrimonio Mundial "Zonas Históricas de Estambul",

fueron restituidas como mezquitas por decisión del Consejo de Estado turco tras un proceso legal. Santa Sofía y Cora son propiedades de la República de Turquía que se conservan meticulosamente en términos de su valor histórico, cultural y espiritual.

El uso funcional de Santa Sofía y Cora está relacionado únicamente con los derechos de soberanía de Turquía. Dado que Santa Sofía, que se abrió al culto hace un año, fue registrada en su Acta de Fundación como una mezquita, su funcionamiento en consecuencia es sólo un acto de restitución y ejercicio de los derechos de soberanía.

Desde el inicio del proceso de restitución, Turquía ha mantenido una comunicación y una cooperación abierta e ininterrumpida con el Centro del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Las dos visitas de la Misión Consultiva de la UNESCO a Estambul por invitación de Turquía ponen de manifiesto nuestro enfoque constructivo y transparente, que también se refleja en los informes de la Misión Consultiva.

Los programas de restauración en curso y otras implementaciones en ambos monumentos no tienen ningún impacto negativo según las normas de la UNESCO, por el contrario, tienen como objetivo proteger la autenticidad y integridad de la propiedad como lo corroboran las misiones de la UNESCO de 2019, 2020 y 2021.

Estamos sorprendidos por la decisión adoptada durante la 44ª sesión ampliada del Comité del Patrimonio Mundial, donde Turquía es actualmente un Estado Parte observador, que incluye expresiones que contradicen los informes de la Misión Consultiva y la situación real de estos monumentos.

Turquía se desvincula de los artículos pertinentes de la decisión sobre las "Zonas Históricas de Estambul" basándose en una redacción sesgada e injusta preparada con intenciones políticas, que es incompatible con las implementaciones, la situación fáctica y los informes de la Misión Consultiva. Nuestra delegación hizo una declaración en este sentido durante la sesión que se reflejará en las actas de la misma.

Plenamente consciente de sus derechos, prerrogativas y responsabilidades con respecto a sus bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, Turquía continuará sus esfuerzos diligentes y rigurosos para preservar sus sitios en el marco de nuestros compromisos con la Convención del Patrimonio Mundial de 1972 como Estado Parte desde 1983.